Periodistas indonesios protestan enfrente de la embajada de Arabia Saudí en Yakarta por la muerte de Khashoggi, en octubre de 2018.
Reporteros sin Fronteras (RSF) ha desvelado la visita discreta que cuatro de sus directivos realizaron el pasado mes de abril a Arabia Saudí para reclamar la libertad de treinta periodistas encarcelados en aquel país. No fue una decisión fácil, han explicado en Londres varios miembros de esa comitiva a EL PAÍS. Eran muy conscientes de que el régimen saudí podría utilizar con intenciones propagandísticas las reuniones mantenidas, como muestra de una presunta apertura de sus autoridades.
El brutal asesinato del periodista Jamal Khasoggi, en octubre de 2018 en el consulado saudí de Estambul, provocó una crisis sin precedentes y fue una grave amenaza a la ya reducida libertad de expresión en el Golfo Pérsico. RSF solicitó, con escasas esperanzas, una reunión con las autoridades saudíes y meses después, para su sorpresa, recibieron el visto bueno. El propio Deloire, junto a la directora de la oficina de RSF en el Reino Unido, Rebecca Vincent, al director de RSF Alemania, Christian Mihr y el expresidente de RSF Suiza, Jonathan Lundqvist, pudieron entablar conversación durante horas con una delegación saudí. En ella estaban incluidos el secretario de Estado para Asuntos Exteriores, Adel Al Jubeir; el ministro para los Medios, Turki Al-Shabanah; el ministro de Justicia, Waleed Bin Muhammad Al-Samaani y el Fiscal General, Saud Al-Mojeb.
Ante la posibilidad de que el Gobierno saudí estudiara posibles indultos por la festividad del Ramadán, RSF decidió mantener el secreto del encuentro durante un tiempo prudencial. Excluida la posibilidad de esos perdones, ha decidido sacar a la luz su esfuerzo durante la Conferencia Internacional para la Libertad de Prensa, que se celebra esta semana en Londres.
Fuente: www.bbc.com