Bill Gates: cómo el proyecto para salvar el planeta quedó frustrado por la guerra comercial de Trump con China

La libertad que le ha dado a Bill Gates tiene una de las chequeras más poderosas del mundo ha llevado al multimillonario a poner en marcha ideas improbables para resolver problemas.

El cofundador de Microsoft no solo es conocido por ser uno de los hombres más ricos del mundo, sino también por financiar proyectos filantrópicos e ideas "locas" para salvar al mundo, como él mismo dice en broma.

Ha donado recursos para la lucha contra el VIH-Sida, diseños de retretes que reciclan agua para comunidades sin servicios públicos, campañas de vacunación contra la polio que deciden qué territorios cubren a través de algoritmos, entre otras causas.

Quizás ninguna ha sido tan ambiciosa como en la que ha trabajado en la última década:  poner en marcha una fuente de energía que sea segura  y  limpia.

"En cualquier problema, siempre buscaré cómo la innovación tecnológica puede resolverlo. Eso es lo que me gusta y lo que soy bueno", dice.

Llegó a la conclusión de que  la energía producida en plantas nucleares es la solución más práctica para la humanidad , un peso de desastre como los de Chernóbil (1986) y Fukushima (2011) han sembrado la desconfianza mundial en esta alternativa.

Buscó a los científicos más avanzados sobre el tema, creó la empresa TerraPower para hacer las pruebas y afinó todos los detalles para los documentos que marcan una prueba de accidentes.

Cuando el proyecto estaba a punto de materializarse, algo interrumpió su sueño:  la guerra comercial de Estados Unidos con China.

 

 

¿Por qué energía nuclear?

Bill Gates es conocido por su fascinación por la lectura -en el documental asegura que lee 150 páginas por hora-, pero hay varios temas que considera especiales.

Leyó "todos" los libros de  Vaclav Smil,  un científico nuestras obras sobre energía operada a Puertas un sentido conceptos de la generación de energías y fuentes alternativas.

"Es muy importante comenzar a desplegar una solución limpia, y debe hacerse extraordinariamente rápido", agrega, advirtiendo que  "suele tomar 50 años"  para revolucionar un campo tan establecido como la producción energética.

Para ello pidió a su equipo en su firma de innovación y financiamiento de tecnología Gates Ventures generar "1.000 ideas locas", hasta que llegó a una conclusión: la energía nuclear es la solución.

Desastres como los de Chernóbil y Fukushima, reconoce, han generado una percepción negativa de la producción de la energía nuclear, la cual también tiene el problema de la generación de desechos tóxicos.

"Lo difícil de la energía nuclear es asegurar que, cueste lo que cueste, esos materiales nucleares (desechos) no salgan", apunta el empresario.

 

¿Qué planeaba hacer?

Mientras que los libros de Vaclav Smil lo acercaron al planteamiento del problema, Gates y su equipo encontraron una solución en el científico Lowell Wood, conocido como el inventor con "más patentes que Thomas Alva Edison".

Gates asegura que en el campo de la energía nuclear "no ha habido innovación en 25 años", por lo que plantas como Fukushima fueron construidas con conceptos de la década de 1970, mientras que Chernóbil con base en diseños de mediados del siglo XX.

Para poner a prueba la idea de un "reactor de onda de propagación", que emplea uranio reducido y no el enriquecido que también se puede usar en armas nucleares, Gates creó TerraPower.

"Funciona como una vela que arde lentamente ynecesita reabastecerse una vez cada década", dice la teoría.

El combustible sería obtenido de los desechos de plantas nucleares que ya existen.

En el caso de EE.UU., aseguran, una parte están almacenados en un paraje del estado de Kentucky que, con el reactor de Gates, serían útiles para proveer de energía a todo ese país por 125 años.

Generaría un gigavatio de electricidad con "prácticamente cero" emisiones de gas de efecto invernadero.

Los científicos tardaron 5 años en probar que funcionaba, en parte debido a los enormes modelos matemáticos que debían ponerse a prueba en computadoras de capacidad enorme.

Y Gates asegura en el documental de Netflix que, además, su modelo es a prueba de "maremoto, terremoto, accidente de avión…".

"En el peor de los casos, el reactor dejará de generar electricidad, pero los materiales radioactivos no podrán salir", indica.

 

La guerra comercial

Comprobado que funcionaba el reactor ideado por Wood, venía la siguiente pregunta: ¿dónde materializarlo?

Larry Cohen, CEO de Gates Ventures, responde en el documental: "China los construye rápido, los hace baratos, y sabe dónde posicionar estas malditas cosas".

Luego de 9 años de desarrollar una relación con China, Gates logró el acuerdo final con el presidente Xi Jinping en 2015 cuando el mandatario visitó la ciudad de Seattle (EE.UU.), hogar del cofundador de Microsoft.

Pero entonces el presidente Donald Trump decidió la llamada "guerra comercial" con China en 2018, por lo que muchos acuerdos bilaterales, incluida la cooperación tecnológica, quedaron suspendidos.

Nathan Myhrvold, un científico del proyecto, dados que perdieron el derecho de construir el reactor en el país asiático: "Al cancelar el contrato (entre gobiernos) que nos dio derecho a realizar cosas nucleares en China, ya no lo tenemos", dados en el documental.

El proyecto no está muerto. Este año TerraPower ha estado trabajando en generar las condiciones para poner la idea en marcha en Estados Unidos, lo que incluye enfrentar la desconfianza de la gente en ese país hacia la energía nuclear.

 

Fuente:  www.bbc.com/