El director de legales aclaró que la FIFA no puede obligar a un futbolista a extender su vínculo con su club más allá del 30 de junio. De Tevez a Scocco, otra disyuntiva en medio de la pandemia.
Proyectar de acá al 30 de junio en un mundo en el que aprendemos, como nunca, a vivir el ahora por culpa del maldito coronavirus roza lo absurdo y es, en cierta forma, temerario. Hasta nuevo aviso, lo más importante es la salud, pero hay situaciones que se vienen y deben ser atendidas más allá de la pandemia.
En lo que se refiere al fútbol, lo más importante entre las cosas menos importantes de acuerdo a la frase que inmortalizó Jorge Valdano, una de las tantas cuestiones por definir son los contratos de los futbolistas de los distintos rincones del planeta, que en varios casos finalizan el 30 de junio.
Y cinco días después de que la FIFA aconsejó oficialmente que se prorroguen dichos vínculos hasta que finalice la competición en cada país, situación que se resolverá cuando la vida retorne a un cause medianamente normal, el director legal de la Federación Internacional cambió un poco el eje del asunto.
O sea que la FIFA dio un consejo, pero de ninguna manera puede obligar a que se hagan efectivas esas extensiones de contratos, algo que de todas formas se tornará prácticamente inevitable si un jugador puntual desea no quedarse parado. "Entendemos perfectamente que puede haber un jugador que no quiera renovar su contrato más allá del 30 de junio pero no hay que perder una perspectiva importante, que es que las ventanas de transferencia no van a ser las mismas. Es decir, el 1 de julio no se va a abrir la ventana de trasferencia y ese jugador no va a poder ser inscripto por otro club si se va del que está ahora", agregó García Silvero.
En este sentido, otra frase del director de legales es esclarecedora: "Si un jugador el 30 de junio quiere finalizar su relación contractual y no extenderla, es probable que el 1 de julio no pueda inscribirse en ningún equipo. Laboralmente se podría incorporar a un equipo, pero no se podría registrar federativamente y por lo tanto no podría jugar. Tendría contrato pero no ficha y eso en la relación laboral de un deportista profesional es hasta contraproducente. Porque es un jugador que estará contratado pero no podrá dar servicio al club".
En la Argentina, los casos más emblemáticos de vínculos que finalizan el último día de junio son los de Carlos Tevez, Nacho Scocco, Licha López, Leandro Fernández y Fabricio Coloccini, entre tantos.
OTRAS DEFINICIONES DE GARCIA SILVERO
El mercado de pases: "Su apertura dependerá de cuando puedan reiniciarse los campeonatos y se van a adecuar a los inicios y finales de los nuevos calendarios".
Mercados abiertos durante más tiempo: "Sin duda que no es la idea. Se planteó en su momento, pero las ventanas de transferencia tienen su razón de ser: garantizar la igualdad competitiva y la integridad de dicha competición con la idea de que un plantel que inicie una temporada y no vaya cambiando constantemente durante el transcurso. En un momento se planteó pero está descartado".
Los préstamos: "Si un jugador está cedido hasta el 30 de junio, técnicamente podría volver al club matriz... Lo que pasa es que nos encontraremos con le problema de las ventanas y ese jugador no podrá ser inscripto en un nuevo club hasta que se vuelva a abrir el mercado. Por eso es recomendable que se prolonguen también (los préstamos)".
Vuelta del fútbol: "El principio fundamental es la salud y por lo tanto no hay instrucciones a las ligas ni a las federaciones para que tengan que reanudarse. Lo mejor es que los gobiernos determinen en cada territorio cuándo se dan las circunstancias y condiciones para hacerlo".
Fuente: www.ole.com.ar/