Tras una jornada de caos y desmentidos, las autoridades sanitarias chinas finalmente confirmaron que el joven médico Li Wenliang falleció en la madrugada del jueves al viernes, hora local.
Li, de 34 años, murió tras contagiarse del nuevo coronavirus, según declaró el hospital que lo atendía y para el que trabajaba, el Central de Wuhan, después de horas de confusión sobre el estado de salud en que se encontraba.
El joven médico, uno de los primeros en alertar sobre el nuevo virus, fue declarado muerto este jueves por la noche, hora local, por reconocidos medios del país, que están controlados por el Estado y suelen ser altavoz de la línea oficial.
No obstante, poco después, el hospital Central de Wuhan desmintió que hubiera muerto: afirmó que estaba en situación crítica, pero que se estaba haciendo "todo lo posible para reanimarlo".
La prensa oficial también se retractó, e incluso borraron las publicaciones en redes sociales en las que informaron del deceso.
Horas después, el hospital confirmó la muerte con un nuevo mensaje en Weibo, la red social más popular del país.
"En la lucha contra la epidemia de la neumonía del nuevo coronavirus, el oftalmólogo de nuestro hospital Li Wenliang desafortunadamente resultó infectado. Li murió pese a todos los esfuerzos para reanimarlo. Lamentamos profundamente su fallecimiento".
Li fue uno de los primeros médicos chinos en alertar sobre el virus, el pasado 30 de diciembre, pero entonces la policía le advirtió que dejara de "hacer comentarios falsos".
Hasta este 5 de febrero, se habían registrado más de 560 muertes por este nuevo coronavirus y 28.000 contagios en China.
La dolencia causa una infección aguda respiratoria y los síntomas habitualmente comienzan con fiebre, seguida de tos seca. Lo más probable es que la mayoría de la gente que contrae el virus se recupere, tal y como lo harían con otra gripe, señalan los expertos.
¿Qué pasó?
Li fue declarado muerto a las 21:30 hora local (13:30 GMT) del jueves y la noticia fue recogida por los medios oficiales chinos, lo que generó una oleada de reacciones en Weibo, el equivalente al Twitter occidental.
El oficial Diario del Pueblo incluso llegó a publicar en Twitter que el fallecimiento del joven médico había causado un "duelo nacional". De hecho, muchos usuarios consideraron a Li un "héroe" y llenaron las redes de manifestaciones de dolor.
Varios periodistas y médicos presentes en el lugar, que no quisieron revelar su nombre, explicaron a la BBC y a otros medios que, tras publicarse la noticia, el gobierno intervino.
Funcionarios del ejecutivo ordenaron a la prensa oficial cambiar sus informaciones para señalar que Li seguía siendo tratado.
El periódico chino en inglés Global Times, también controlado por el Estado y de línea nacionalista, publicó entonces que Li estaba recibiendo tratamiento con una máquina de oxigenación por membrana extracorpórea (ECMO).
¿Cuál es la historia de Li?
Li fue uno de los primeros médicos chinos en alertar a sus compañeros de profesión sobre la aparición del nuevo coronavirus, si bien por aquel entonces no sabía lo que estaba enfrentando.
En su mensaje del 30 de diciembre, enviado a través de un chat privado, Li recomendaba a los participantes en la conversación que tuvieran cuidado con una nueva enfermedad misteriosa y les recomendó usar ropa protectora para evitar contagiarse.
Cuatro días más tarde, recibió una visita de funcionarios de la Oficina de Seguridad Pública, quienes le dijeron que firmase una carta.
En ella, lo acusaban de "hacer comentarios falsos" que habían "perturbado severamente el orden social".
Las autoridades tuvieron que pedirle disculpas unos días después, revelando que lo que le ocurrió a este doctor pone de manifiesto la respuesta fallida en las primeras semanas de la epidemia.
El caso de Li tomó aún más relevancia cuando a finales de enero, la Corte Suprema de China reconoció que la actuación policial respecto al joven médico había sido un error.
En las primeras semanas de enero, las autoridades en Wuhan insistían en que solo aquellos que entraban en contacto con animales infectados podían contraer el virus.
A los médicos no se les advirtió que usaran mascarillas o ropa protectora.
El 10 de enero empezó a toser.Al día siguiente tuvo fiebre y dos días más tarde estaba en el hospital.
Sus padres también se enfermaron y fueron hospitalizados.
Varios diagnósticos
Fue diez días más tarde, el 20 de enero, cuando China declaró la emergencia a raíz del brote.
Li contó que le hicieron pruebas varias veces para ver si se trataba del coronavirus y que todas dieron negativo.
El 30 de enero volvió a hablar del tema en redes sociales.
"Hoy me dieron el resultado de las pruebas de ácido nucleico y es positivo. Finalmente he sido diagnosticado", publicó.
El joven médico deja un hijo y una esposa embarazada.
Fuente: www.bbc.com/