Por sexto día consecutivo las protestas, los toques de queda, los saqueos y la ira sacuden a Estados Unidos. De un extremo a otro: de Nueva York a Los Ángeles, de Florida a Seattle e, incluso, las cercanías de la Casa Blanca.
Las manifestaciones, que comenzaron inicialmente en Minneapolis luego de que George Floyd, un afroestadounidense de 46 años, muriera después de que un policía le presionara el cuello con la rodilla durante más de 8 minutos, se han extendido por más de 75 ciudades de todo el país.
A lo largo de casi una semana, las marchas en protesta por la brutalidad policial contra los afroamericanos han continuado tornándose en enfrentamientos con la policía, quema de autos y actos violentos.
Para tratar de contener la situación, las autoridades locales decretaron toques de queda en más de 40 ciudades y en 15 estados desplegaron la Guardia Nacional, la fuerza militar de reserva que EE.UU. usa para situaciones de emergencia.
Según le aseguró a la BBC Darnell Hunt, profesor de sociología y estudios afroamericanos en la Universidad de California en Los Ángeles, los disturbios de esta semana en Estados Unidos son los más graves que se reportan en el país desde 1968, cuando Martin Luther King Jr. fue asesinado.
Y, en su criterio, la forma en que la policía ha respondido con un "aumento en su agresividad" puede llevar a empeorar la situación.
"Desplegar la Guardia Nacional, usar balas de goma, gases lacrimógenos y gas pimienta, estas son una variedad de tácticas policiales que pueden exacerbar una situación ya tensa", afirmó.
Las manifestaciones de miles de personas tienen lugar a pocos días de que EE.UU. comenzara a reabrir tras ser azotado por la pandemia de coronavirus, que ha dejado allí más de 100.000 muertos y mientras siguen vigentes normas de distanciamiento social.
Estas son alguna de las últimas noticias:
- Trump les dijo a los gobernadores en una videoconferencia este lunes que "si no se imponen, estarán perdiendo el tiempo" y que "los van a atropellar, van a parecer un montón de idiotas". La Casa Blanca dijo que sus palabras están sacadas de contexto.
- En al menos 75 ciudades de EE.UU. se registraron protestas que derivaron en muchos casos en enfrentamientos con la policía y vandalismo.
- Unas 40 ciudades decretaron toques de queda, pero las manifestaciones continuaron.
- Trump, que atribuye los disturbios a la "izquierda radical", anunció que designará al movimiento "Antifa" como "grupo terrorista".
- Medios estadounidenses informaron el domingo que Trump fue llevado de emergencia a un búnker, ante la cercanía de los manifestantes a la Casa Blanca.
- Un abogado de la familia de Floyd acusó de "asesinato premeditado" al oficial de policía que puso la rodilla sobre su cuello.
- Las protestas se extendieron el domingo a varias ciudades fuera de EE.UU. entre ellas Berlín, Toronto y Londres, donde una veintena de personas fue detenida.
¿Qué pasó en las protestas el domingo?
En Washington D.C., los manifestantes pusieron en alerta otra vez al Servicio Secreto, encargado de la seguridad de Trump y se registraron enfrentamientos con la policía, que lanzó gases lacrimógenos.
En el distrito capital también se reportaron altercados e incendios en un parque y una iglesia cercanos a la Casa Blanca, que ya el viernes tuvo que ser cerrada de emergencia.
Por segundo día consecutivo, miles de personas salieron a las calles en Florida y en la ciudad de Miami, lo que empezó como una protesta pacífica se tornó en un caos luego que unos manifestantes rompieran vidrios y la policía respondiera con bombas de humo.
Lo que en Los Ángeles se inició como una protesta pacífica cerca del muelle de Santa Mónica terminó en enfrentamientos entre manifestantes y policía. También se reportaron saqueos en tiendas de marcas populares como Vans, Gap y Nike, así como en centros comerciales y otros puntos de venta.
Más de 80 personas fueron detenidas en Detroit, donde hubo reportes también de tiroteos y de altercados entre los manifestantes y la policía, mientras en Birmingham, Alabama, los manifestantes comenzaron a derribar un monumento confederado.
En Nueva York, donde se reportó un centenar de detenidos, los manifestantes marcharon a través de los puentes de Brooklyn y Williamsburg, y detuvieron el tráfico en el puente de Manhattan.
En Filadelfia, también ocurrieron nuevos saqueos e incendios de carros de la policía, mientras en Seattle se incendiaron decenas de carros y se saquearon varios comercios.
En Salt Lake City, un hombre apuntó con un arco y una flecha a los manifestantes y fue atacado por la multitud, según informó la agencia de noticias Reuters.
Tras las crecientes protestas en Arizona, el gobernador declaró el estado de emergencia e impuso un toque de queda "efectivo por una semana".
En Chicago una multitudinaria protesta durante el día terminó en vandalismo durante la noche y grandes cadenas de supermercados como Walmart y Target fueron saqueadas.
Análisis de Anthony Zurcher, periodista de la BBC en Washington
Durante más tres años, Donald Trump ha gobernado una nación de relativa paz y prosperidad.
Las crisis que tuvo hasta ahora fueron en gran medida de su propia creación y las enfrentó reuniendo a sus partidarios y condenando a sus oponentes.
Ahora Trump enfrenta una situación inadecuada para un libro de jugadas de división.
La economía estadounidense se ha visto afectada por una pandemia mortal y la muerte de George Floyd a manos de un oficial de policía de Minneapolis ha extendido los disturbios raciales en todo el país.
La gente ahora vive momentos de incertidumbre, tiene miedo y está cada vez más enojada.
Estas son circunstancias que pondrían a prueba las habilidades de incluso los líderes más hábiles. Este presidente, sin embargo, corre el riesgo de perderse en el mar.
Sus llamados públicos a la unidad han sido socavados por una inclinación por los insultos y la belicosidad en Twitter. La disciplina en cuanto a los mensajes, un atributo valioso en este momento, no es su fuerte.
Puede que no haya una manera fácil de guiar a la nación a través de su peligro actual.
¿A qué se deben las protestas?
Las protestas, que se suceden por sexto día consecutivo y a las que se han sumado nuevas ciudades, se desataron luego de que se difundiera un video en que se ve al hombre negro con dificultades para respirar en el piso, mientras un policía blanco le presiona el cuello con la rodilla.
Los agentes de policía abordaron a Floyd porque sospechaban que había usado un billete falsificado de US$20.
Al ser inmovilizado con la rodilla en su cuello, el hombre intenta pedir ayuda y grita en varias ocasiones "no puedo respirar" o "voy a morir".
Posteriormente, aparece inmóvil en las imágenes, antes de ser puesto en una camilla y trasladado en una ambulancia.
Derek Chauvin, el policía que aparece en la imagen, fue arrestado el viernes por su presunta vinculación con la muerte de la víctima y otros tres funcionarios del Departamento de Policía de Minneapolis (MPD) fueron despedidos. El FBI se sumó a la investigación de los hechos.
Los manifestantes denuncian que la muerte de Floyd es un acto de discriminación racial y exigen que se tomen medidas para evitar que sucesos así se repitan y que los otros tres agentes que estuvieron presentes durante el suceso sean llevados ante la justicia.
Fuente: www.bbc.com/