Un escándalo estalló en el Consejo de la Magistratura a partir de que la Justicia admitió no tener aún la capacidad de proveer una plataforma tecnológica para continuar juzgando a la vicepresidenta Cristina Kirchner por corrupción en el proceso en el que se la investiga si benefició al empresario Lázaro Báez en el reparto de obra pública.
El Tribunal Oral Federal N° 2 (TOF 2) recibió un mail del director de Tecnología, Ricardo Noziglia Wilde, en el que se informó lo siguiente: "Por el momento nos encontramos en etapa de elaboración de nuevas soluciones, que cuando los superiores así lo indiquen, se encontrarán en condiciones de satisfacer lo requerido".
En esa nota -a la que se accedió - Tonelli le argumenta a Lugones que es "una falta de respeto a los consejeros que esa respuesta" se hubiera dado sin el conocimiento de los integrantes del cuerpo y que tampoco les hubieran avisado luego de los términos de esa contestación. "Me llama la atención que el tema no haya sido mencionado en la reunión de Labor del pasado martes, momento en el cual la respuesta ya habría sido enviada" , escribió el legislador macrista.
Por eso es que los seis consejeros que no comulgan con el oficialismo le pidieron a Lugones que el director de Tecnología informe por escrito y en 24 horas, "las razones y fundamentos de su respuesta". Además, le reclamaron "la pronta convocatoria a una reunión de consejeros para analizar y discutir el tema con la profundidad que merece".
¿Motivación política?
Tonelli no lo menciona en la nota, pero entre los consejeros de la oposición crece la sospecha de que hay una motivación política para trabar el juicio contra Cristina Kirchner, porque es de sentido común que si sesionan ambas cámaras del Congreso y hasta el propio Consejo de la Magistratura por vía remota, cómo es posible que no lo hagan los jueces para continuar el juicio.
La respuesta por mail del director de Tecnología del Consejo es confusa en su redacción y sorprendió por su estilo a los que la recibieron.
El correo electrónico que transcribió el secretario del tribunal Tomás Cisneros señala: "Por el momento nos encontramos en etapa de elaboración de nuevas soluciones que cuando los superiores así lo indiquen se encontrarán en condiciones de satisfacer lo requerido. La disponibilidad de recursos habilitados asciende a 122 puertos para todo el país, y requiere la instalación de un cliente y una VPN por cada participante. Se trata de un sistema dimensionado para tiempos normales con mayoría de participantes internos y mayormente puntos fijos externos (consulados, salas de audiencias, etc.). Razón por la cual, la dirección con buen criterio ha estado trabajando en modalidades que permitan esta nueva operatoria flexible. Hasta recibir nuevas indicaciones de los superiores no cuento con fechas ni detalles que pueda comunicar".
No aclara el funcionario quién es el superior al que alude, y si se refiere al presidente del Consejo, el juez Lugones, o al cuerpo.
El Tribunal Oral Federal N° 2, integrado por los jueces Rodrigo Giménez Uriburu, Jorge Gorini y Andrés Basso, había preguntado hace unos días si era posible seguir adelante con el juicio, que requiere de 50 conexiones de videoconferencias simultáneas. El fiscal Diego Luciani, en tanto, les había pedido a los jueces que analicen la posibilidad de seguir con el juicio luego de las sugerencias de la Cámara de Casación en ese sentido.
Fuente: www.lanacion.com.ar/