El presidente de Venezuela nuevamente afirma que hay plan para asesinarlo

El presidente de Venezuela nuevamente afirma que hay plan para asesinarlo

Nicolás Maduro, en el palacio de Miraflores.

El régimen de Nicolás Maduro ha denunciado este miércoles un supuesto nuevo intento de asesinarlo y sacarlo del poder por la fuerza que ha sido frustrado por sus fuerzas de seguridad. "Hemos revelado, desmantelado y capturado a una banda fascista de terroristas que planearon un golpe de Estado contra la sociedad y la democracia venezolana. Han sido capturados, tras las rejas, con pruebas claras después de seguir a este grupo de delincuentes", dijo Maduro en una transmisión televisada.

Más temprano su ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, había señalado en una rueda de prensa que el plan supuestamente involucraba un ataque en la sede del Servicio Bolivariano de inteligencia, Sebin, para liberar al general Raúl Isaías Baduel, exministro de Defensa que fue arrestado por acusaciones de corrupción en 2009 luego de haberse distanciado de Hugo Chávez y de su proyecto político, por lo que se le ha considerado un preso político. La apuesta de los conspiradores, según Rodríguez, era que el militar asumiera el poder.

El pasado viernes, horas antes que la alta comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, abandonara el país, fueron detenidos sin órdenes judiciales cuatro oficiales de la Fuerza Armada Nacional, los coroneles retirados de la Aviación Miguel Castillo Cedeño y Francisco Torres Escalona; el capitán de corbeta, Rafael Acosta Arévalo; el general de brigada de la Aviación, Miguel Sisco Mora, director del Servicio Autónomo del Aeropuerto del Estado de Aragua; y dos funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc), los policías José Valladares y Miguel Ibarreto. Sus familiares denunciaron las desapariciones en vídeos o testimonios escritos e indicaron que los hombres fueron capturados por personal del Sebin en distintas zonas de Venezuela.

El fantasma de la conspiración persigue a Maduro desde hace tiempo. En los últimos dos años más de un centenar de militares ha sido apresados. En agosto pasado, durante un acto militar en Caracas, explotaron sin generar daños dos drones con los que supuestamente intentarían darle un atentado. Las dudas sobre la lealtad de su Fuerza Armada Nacional se han disparado en medio del resquebrajamiento de sus apoyos, a raíz del choque de poderes que se ha desencadenó en enero cuando Juan Guaidó se juramentó como presidente interino con el reconocimiento de más de 50 naciones y comenzó su cruzada por la transición a la que insistentemente ha llamado a los militares a sumarse.

El líder del chavismo parece estar en arenas movedizas. En enero ocurrió un alzamiento de militares de bajo rango en Caracas que logró ser controlado. El 30 de abril una operación militar frustrada en apoyo a Guaidó, en la que se logró la liberación de Leopoldo López de su prisión domiciliaria, y que fue planificada por el jefe de Inteligencia del chavismo, Manuel Cristopher Figuera, exdirector del Sebin, hoy en el exilio en EE UU, se convirtió en el más importante quiebre que ha sufrido en sus cuadros de fuerza. Menos de dos meses después, este supuesto nuevo intento de golpe vuelve a tambalear su seguridad.

El clima de desconfianza se ha enrarecido aún más con la suspensión del tradicional desfile militar del Día del Ejercito, que se celebró el pasado lunes en conmemoración de los 198 años de la Batalla de Carabobo. Maduro encabezó un breve acto junto con su cúpula política, desde un podio alejado de los soldados, en el que anunció que para el 2020 llevará a cuatro millones su cuerpo de milicianos.

Fuente: https://elpais.com/internacional/2019/06/27/actualidad/1561604409_820026.html