Es demasiado grande para existir. Esa es la conclusión que desconcierta a los astrónomos después de encontrar el LB-1, el nombre que le dio un agujero negro que el acuerdo a sus errores es 70 veces mayor que nuestro Sol.
Las posibilidades de observación a distancia del Telescopio Chino Espectroscópico de Gran Área del Cielo (LAMOST, por sus iniciales en inglés), de la Academia de Ciencias China, y el Observatorio Keck ubicado en Hawái, Estados Unidos, permitieron tener datos concluyentes sobre este s u peragujero negro .
¿Por qué es tan diferente de los otros?
Un agujero negro "es un montón de materia apeñuscada en un espacio tan pequeño que nada puede salir, ni siquiera la luz", según específicamente de forma simplificada el cosmólogo Andrews Pontzen a la BBC en una entrevista en 2017.
Se forman a partir de la contracción de los núcleos de estrellas gastadas. Según aclara la revista científica Quanta , el proceso de formación de un agujero negro depende del tamaño de esa estrella.
Pero cada cierto tiempo salen nuevas teorías o evidencias de observación astronómica de que sí hay agujeros negros de semejante tamaño porque la implosión de los núcleos sí puede generar esta masa densa que se traga hasta la luz.
Más preguntas que respuestas
Los experimentos físicos y observatorios científicos LIGO y Virgo habían revelado la posibilidad de que estos agujeros negros existiesen, ahora, el LB-1 confirma la existencia de estos agujeros de tamaño descomunal, según explican en el estudio publicado por Nature .
"Una posibilidad muy interesante es que esta materia oscura contenga dos agujeros negros orbitando entre sí", se aventuran a conjeturar los autores del estudio y más tarde aclaran que esto llevaría a observar más la formación de agujeros negros binarios.
Fuente: www.bbc.com/