Según informan medios brasileños, pese a que el alcalde de Río de Janeiro sólo autorizó trabajos de fisioterapia para los equipos de la ciudad, el campeón de América se entrenó en el campo de juego y realizó tareas con pelota.
Con 271.885 casos y 17.983 fallecidos, Brasil es hoy uno de los países más afectados en el mundo por la pandemia de coronavirus. Sin embargo, pese a la preocupante situación, los clubes y muchos políticos, entre ellos el presidente Jair Bolsonaro, quieren que el fútbol vuelva cuanto antes. Para eso, luego de realizar los testeos correspondientes dentro de los planteles, los equipos volvieron a trabajar.
Sin embargo, los clubes de Río de Janeiro viven una situación particular con respecto al resto de los equipos. Es que, por ser uno de los estados más afectados por la pandemia, principalmente la ciudad de Río, el alcalde Marcelo Crivella decidió no autorizar aún el regreso de los entrenamientos. En estos días, dejó en claro que los jugadores sólo podrían realizar trabajos de fisioterapia.
Pero, pese a la negativa del alcalde, medios brasileños informaron que tanto martes como miércoles Flamengo realizó tareas con pelota en el campo de juego, algo que no podrían hacer. Oficialmente, el club anunció el martes a la noche que el regreso de los futbolistas al predio de Ninho do Urubu era sólo para evaluaciones, por lo que no estaba desobedeciendo la decisión del alcalde. Sin embargo, tal como pudo capturar Globoesporte, este miércoles los jugadores volvieron a entrenarse en el campo de juego, separados en dos grupos, uno de 10 jugadores y otro de 9.
"Los procedimientos fueron aprobados para evitar el contagio cuando los clubes regresen a los entrenamientos y los partidos. También se autorizó el regreso de los deportistas que estaban en fisioterapia, cuyos casos podrían empeorar. Se comunicó al presidente de Flamengo y Vasco que esto había sido deliberado. El consejo no aprobó el regreso de los entrenamientos", explicó Beatriz Busch, Secretaria Municipal de Salud.
Ante esta negativa, Flamengo y Vasco, que también presentan casos positivos dentro de sus planteles, no quieren retrasarse con respecto al resto de los equipos y por eso le solicitaron a Jair Bolsonaro una autorización para trasladarse a Brasilia para continuar con los entrenamientos. La intención es realizar las prácticas en el Mané Garrincha. La idea es apoyada por Ibaneis Rocha, gobernador del Distrito Federal, que es hincha de Flamengo y que tiene buena relación con ambos clubes.
Fuente: www.ole.com.ar/