Gracias a la profundización de la reactivación económica, la desocupación volvió a ser de un dígito tras cuatro meses en niveles récord como consecuencia de la pandemia de coronavirus.
El desempleo en Estados Unidos bajó en agosto a 8,4%, una mejora que estuvo por encima de las expectativas, luego que la economía sumara 1,4 millones de puestos de empleo, según las cifras difundidas este viernes por el Departamento de Trabajo.
La desocupación vuelve así a una tasa de un dígito después de cuatro meses por encima del 10%, pero la economía –muy golpeada por la pandemia en el país del mundo con más casos de coronavirus– todavía tiene un largo camino a la recuperación. Por caso, las remuneraciones horarias promedio de los trabajadores fueron en agosto un 0,4 % menores que en el mes anterior, indicó el informe de la cartera laboral.
“Estas mejoras en el mercado laboral reflejan la continuada reanudación de la actividad económica que se había restringido debido a la pandemia de COVID-19 y los esfuerzos para contenerla”, explicó el boletín de la Oficina de Estadísticas Laborales.
El sector privado añadió el mes pasado 1,46 millones de empleos y otros 301.000 se abrieron en el gobierno, añadió el informe, que señaló que el crecimiento del empleo gubernamental refleja la contratación temporal de personal para el Censo 2020. “Hubo aumentos notables de empleo en el comercio minorista, los servicios profesionales y empresariales, esparcimiento y hotelería, y en la educación y el cuidado de la salud”.
El índice de desempleo en los Estados Unidos, que estaba en el 3,5% en febrero, el nivel más bajo en medio siglo, saltó al 14,4 % en abril cuando hizo su mayor impacto la pandemia de coronavirus, y desde entonces ha ido descendiendo gradualmente. La economía ha recuperado hasta acá cerca de la mitad de los 22 millones de empleos perdidos por la crisis sanitaria.
El informe del Departamento de Trabajo se sumó a la evidencia de que casi seis meses después de que el coronavirus paralizara el país, la economía se está recuperando en forma irregular. Desde pequeños negocios hasta hoteles, restaurantes, aerolíneas y lugares de entretenimiento, un amplio espectro de compañías están luchando por sobrevivir a la pérdida de clientes.
Tras un colapso épico en la primavera, cuando la economía se contrajo a una tasa anual de aproximadamente el 30%, el crecimiento ha ido repuntando a medida que los estados han reabierto al menos partes de sus economías. Sin embargo, la recuperación está lejos de ser completa.
Muchos economistas piensan que la contratación significativa puede ser difícil de sostener porque los empleadores están operando bajo una nube de incertidumbre sobre el virus. El número de casos confirmados diariamente ha caído de 70.000 en junio a unos 40.000. El descenso se ha estabilizado en la última semana y la cantidad de contagios sigue siendo más alta que en mayo y junio.
Como resultado, actividades como la gastronomía y los viajes aéreos están todavía muy por debajo de los niveles pre-pandémicos. La mayoría de los economistas dicen que una recuperación económica significativa será probablemente imposible hasta que el coronavirus sea controlado, muy probablemente por el uso generalizado de una vacuna.
El informe de empleo de este es el penúltimo antes del día de las elecciones, el 3 próximo de noviembre. El presidente Donald Trump se enfrenta a la desalentadora tarea de buscar la reelección en la peor crisis económica desde los años 30. Sin embargo, los votantes en las encuestas le han dado en general mejores notas en la economía que en otros aspectos de su presidencia.
Fuente: www.infobae.com/