Una muralla aérea sobre China se ha comenzado a levantar a unas horas de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró una alerta internacional por el brote de coronavirus de Wuhan.
Dos de las mayores aerolíneas de Estados Unidos, Delta Airlines y American Airlines, anunciaron este viernes que suspendían sus vuelos a la China continental en atención al anuncio de la OMS.
Las estadounidenses se suman a otras de las mayores líneas aéreas del mundo que suspendieron esta semana sus viajes al país asiático: Air France (Francia), Lufthansa (Alemania), Turkish Airlines (Turquía), British Airways (Reino Unido), Alitalia (Italia) y Air Canada (Canadá), entre otras.
El periodo de suspensión de vuelos varía entre aerolíneas, algunas iniciando de inmediato, otras a principios de febrero, y se mantendrán hasta marzo e incluso algunas en algunos días de abril.
Y el gobierno de EE.UU., tras emitir una alerta en la que pide a sus ciudadanos no viajar a China anunció el veto a la entrada al país de los extranjeros que haya visitado el gigante asiático, con la excepción de familiares directos de ciudadanos estadounidenses.
Al declarar el jueves la alerta de salud pública internacional, el director de la OMS, Tedros Adhanom, dijo que no había motivos para limitar el tráfico internacional.
"No hay razón para tomar medidas que interfieran innecesariamente con los viajes internacionales y el comercio. Hacemos un llamado a todos los países para que implementen decisiones basadas en evidencia y que sean consistentes", expuso.
Sin embargo, el Departamento de Estado de EE.UU. emitió una alerta de viaje Nivel 4 para China, la más alta de su escala de advertencias, en la que explícitamente pide "no viajar" al país asiático.
"No viajes a China debido al nuevo coronavirus identificado por primera vez en Wuhan, China. El 30 de enero, la Organización Mundial de la Salud determinó que el brote de rápida propagación constituye una emergencia de salud pública de preocupación internacional", dice la alerta.
"Los viajeros deben estar preparados para que las restricciones de viaje se apliquen con poca o ninguna notificación previa. (…) Los que están actualmente en China deberían considerar partir utilizando medios comerciales", añade.
Además, a partir del 2 de febrero, los ciudadanos estadounidenses que hubieran estado en la provincia de Hubei, donde está Wuhan, en las últimas dos semanas serán puestos en cuarentena.
Las aerolíneas chinas continúan volando al exterior, principalmente ciudades de Europa y Medio Oriente, pero países como Italia o Israel han decidido suspender todos los vuelos entrantes y salientes hacia ese país.
En el caso de EE.UU., todos los vuelos desde China serán concentrados en unos pocos aeropuertos, los mejor preparados para escanear y aislar a los pasajeros.
Afectaciones
El jueves, la OMS informó su último registro hasta ese momento indicaba que 170 personas han muerto por el coronavirus en China, mientras que había más 8.000 eran casos confirmados.
Mientras que en ese país se concentra el 99% de los casos, en otros 18 países ya se había confirmado la presencia del virus en 98 personas, además de que se detectaron ocho casos de contagio de persona a persona en Alemania, Japón, Estados Unidos y Vietnam.
"Más importantes que la declaración de una emergencia de salud pública son las recomendaciones del Comité para prevenir la propagación del coronavirus y garantizar una respuesta mesurada y basada en evidencia", dijo el director de la OMS este jueves.
Pese al llamado a la mesura, los Estados miembros de la OMS sí pueden tomar sus propias decisiones, como limitar los vuelos.
Peter Morris, economista en jefe de la consultora Ascend by Cirium, dijo que ya se está viendo un "impacto dramático" por el coronavirus en el ámbito de los vuelos comerciales.
"Son casi 10.000 vuelos programados hacia, desde y dentro de China suspendidos entre el 23 y el 28 de enero (…) El brote inevitablemente causará una interrupción significativa de los horarios y los patrones de viaje a corto y mediano plazo", explicó.
Olivier Pondi, un especialista en análisis de datos para el sector de viajes y transporte aéreo que trabaja para la consultora ForwardKeys, también señaló que ya se empiezan a sentir las afectaciones en los viajes de los propios chinos.
La propagación del virus "ha causado un retroceso sustancial en las reservaciones de vuelos para el período del Año Nuevo chino, del 10 de enero al 6 de febrero de 2020", explicó a la agencia AFP.
"Asia-Pacífico, la región que atrae a más del 75% de los viajeros del Año Nuevo chino, ha sido la más afectada", con una caída de más de 15% en la tercera semana de enero.
Fuente: www.bbc.com/