Fitch Ratings, que utilizó el concepto “default restringidi”. rebajó la nota de la deuda soberana por el incumplimiento de USD 503 millones.
La calificadora de riesgo Fitch Ratings colocó hoy a la deuda soberana argentina en categoría de default luego de que el Gobierno no pagara el viernes último un vencimiento de 503 millones de dólares.
“Las calificaciones de emisión de los tres bonos senior no garantizados en moneda extranjera se rebajaron a 'D' desde 'C' y se retiraron por la siguiente razón: quiebra de la entidad calificada, reestructuración de deuda o incumplimiento de emisión / tramo”.
“La rebaja de la calificación de Argentina a Default restringido se debe a la incapacidad de las autoridades de pagar los intereses de tres bonos soberanos dentro del período de gracia estipulado de 30 días que expiró el 22 de mayo. Esto marca un evento de incumplimiento bajo los criterios de Fitch con respecto al Calificación de incumplimiento de emisor (del soberano, así como las calificaciones de emisión individuales de los valores afectados (bonos globales 2021, 2026 y 2046)”, expresó.
Fitch recordó que el Gobierno “continúa negociando con los acreedores para una reestructuración integral de sus bonos externos. Los tenedores de bonos rechazaron la oferta inicial de canje de deuda hecha por las autoridades el 16 de abril y desde entonces han presentado contraofertas. El gobierno ha extendido su fecha límite para finalizar las negociaciones hasta el 2 de junio desde el 22 de mayo”.
“Las partes involucradas han indicado avances recientes hacia una reestructuración integral, aunque persiste la incertidumbre sobre las perspectivas de llegar a un acuerdo con la aceptación de los tenedores de bonos suficiente para cumplir con los diferentes umbrales establecidos en cláusulas de acción colectiva en los valores”, expresó.
Si se llegara a un acuerdo, y se produjera “una reestructuración de los bonos, esto constituiría un intercambio de deuda en dificultades (DDE) según los criterios de Fitch. Si esta operación normalizara las relaciones con la comunidad financiera internacional, en opinión de Fitch, resultaría en la mejora de las calificaciones soberanas de ‘RD’ a un nivel consistente con sus fundamentos crediticios a futuro”.
Al igual que sus colegas de Standard & Poor’s y de Moody’s, el analista de riesgo soberano de S&P Todd Martínez dijo que, si hubiera un canje, “aunque fuera voluntario y de buena fe, implicaría una rebaja a un default si involucrara pérdidas para los bonistas. Eso pasó en Uruguay en 2003 por ejemplo”.
Sin embargo, aclaró, “después del canje subiríamos la calificación de nuevo a un nivel compatible con nuestra evaluación de la capacidad de pago del Gobierno en adelante. Dependerá de los nuevos términos de la deuda y las perspectivas económicas”.
Su par Gabriel Torres de Moody’s dijo desde Nueva York que “la calificación no volverá a bajar, aunque el país no haya pagado, porque la nota actual que tiene la deuda argentina asume que, cuando haya un canje, habrá una pérdida para los bonistas del 35 al 65 por ciento”.
Según Moody’s, la nota argentina está en el “antepenúltimo escalón sobre 22 que hay en total”. En la región, Chile está en el quinto escalón y Perú en el séptimo.
Según Torres, las consecuencias de un default se observarán “cuando termine la pandemia, porque el país va a necesitar inversiones para recuperarse; y esas inversiones llegan de acuerdo al costo de cada país”.
“Detrás de la pandemia está el impacto de la crisis local y en 2021 será más nítido el costo de la emisión monetaria sobre los precios”, indicó.
En tanto, desde Standard & Poors una calificada fuente explicó que la deuda se encuentra en la categoría de “default selectivo” desde hace varios meses y reiteraron que cualquier canje que implique una pérdida para los bonistas es un evento de cesación de pagos. Lo que sí pasará en particular si mañana el Gobierno no paga, es que se les bajará la nota a los tres bonos involucrados.
Para S&P toda la deuda soberana, tanto en moneda local como extranjera, está en default.
Fuente: www.infobae.com/